Epílogo Te enseñaré a amar [Fanfic]

Epílogo.

Una semana antes de la boda.

Llevar a cabo los preparativos para una boda, no es cosa sencilla, y no es que nosotros fuéramos a planear algo grande, aunque tanto mi suegra como mi cuñada esperaban que fuera algo así, solamente deseábamos estar con los amigos, y una sencilla comida, en realidad si hubiera sido por Kyu el mismo día que acepte su propuesta nos hubiésemos casado.

Tres días antes Hae Mi y Kim Woo se encontraban bastante atareados, ya que los novios no habían podido terminar de arreglar las cosas que tenían en su nueva casa, o mejor dicho en el pequeño departamento que compartirían, era divertido que ellos lo hicieran, ya que ambos los querían mucho, fue un día muy pesado al decidir que cosas desecharían, pues el departamento ya estaba lleno de cajas para empezar acomodar, cosa que haría la feliz pareja.

Los días habían pasaron terriblemente para HaJoon y Kyu, ella estaba en la casa que le habían alquilado por parte del museo y Kyu por su parte tuvo que quedarse alojado con un amigo, esa semana que paso alejado de ella, se dio cuenta que era la indicada, gracias a dios pensaba que solo eran unos cuantos días, antes de poder decir que ella, su HaJoon, sería completamente suya.

HaJoon empezó hacer los preparativos para su boda con Kyu, luciría un sencillo vestido blanco tipo strapples hasta las rodillas, algo tan sencillo la haría verse hermosa, Kyu por su lado había escogido un smoking color negro el cual lo hacía verse realmente guapo, tan sólo quedaba un día para que su vida tuviera otro inicio pero no eran todas las sorpresas que les deparaba el destino.

En la tarde mientras comían pizza sentados en el suelo de la sala, hablaban sobre lo que tenían planeado el día siguiente, justo el de la boda, los invitados, la comida, pero sobre todo el que estarían por fin juntos, Kyu la miraba y la miraba y volvía a mirarla, sin atreverse por fin a decir lo que en esos momentos quería.

Casi hasta las 11 de la noche Kyu fue que se levanto tomó su mano y le dijo, no crees que tu novio esta muy cansado y debería ir a dormir, corrigió deberíamos ir a la cama, ella sorprendida lo miró, el comprendió sus palabras y le dijo, no, no me malinterpretes me refiero que deberíamos dormir, ya sabes en la cama, no es lo que quiero decir, digo tú en tu recamara y bueno yo creo que debería quedarme aquí en el sillón, ella simplemente sonrío y lo tomo de la mano, fue la primera vez que fue algo incomodo dormir pues ya no eran los amigos de antaño, ni tampoco aún eran los amantes apasionados eran dos chicos que estaban nerviosos pues al día siguiente serían marido y mujer.

Hae Mi y Kim Woo lucían muy elegantes, esa tarde de primavera, Shin Woo, estaba más nervioso que el novio, ya que este no dejaba de dar vueltas y vueltas por todo la habitación, la novia por su parte, lucía bastante emocionada esperando el momento para salir, no era algo llamativo solo algunos compañeros de ambos de sus trabajos, Hae Mi, Kim Woo y Shin Woo, serían los únicos participes de este momento y fue así como la hora tan ansiada llego.

Shin Woo no dejaba de mirar con un poco de envidia a Kyu por haberse casado antes, sobre todo por que el era el Hyung, aún así no podía evitar sentir también algo de tristeza por no haber sido el, a quien ella amará, aún a pesar de haber sido el quien la conociera primero.

A tan solo unos cuantos minutos de entrar ella, el lucía bastante ansioso, por fin se escucho la marcha nupcial, Kyu miraba hacia el frente, temeroso de voltear y que ella no entrará, pero pudo más su curiosidad y cuando lo hizo un ángel apareció si pensaba que ella era linda, en ese momento sólo pudo constatar que en realidad era más que hermosa, ella era su poesía en movimiento, no existiría nadie más para él, ella era perfecta, con todo y sus defectos, ante él, ella era todo el mundo, el día, la noche, las estrellas, la luna, en conjunto, como ella diría su mundo color caramelo.

El no podría haber sido el hombre más feliz, hasta que ella dijo si acepto, el la miro como nunca antes y le dijo yo quizás no sea capaz de darte el mundo entero, pero solamente quiero ser para ti, amor eterno y derritiéndose en su mirar, la beso, un beso que sello para siempre su gran amor, ella en sus pensamientos llego a la conclusión, que ella nunca no le enseño a amar, si no que fue al revés.

{Argumento...}