Capítulo XI Revelando secretos [Fanfic]

Capítulo XI Revelando secretos.

—Estando en la estación Hajoon miró una vez más el reloj, partiría rumbo a Itaewon para comenzar una nueva vida, por el momento era una cobarde, pero tampoco sabía como enfrentarse a su confundido futuro, así que para tomar el valor necesario prefirió alejarse por un tiempo.

—Shinwoo le dio un fuerte abrazo y mirándola le dijo —él no sabe nada no esperarás que por un milagro llegué ¿verdad?—

—Kyu espero una, dos, tres horas y ella no apareció empezó a preocuparse y llegó hasta su casa, se encontró con la sorpresa que todo estaba cerrado y al mirar por la ventana, todo estaba cubierto.

Una semana había pasado y Kyu no tenía ni una sola noticia de ella, la tierra se la había tragado todas las noches llegaba al parque con la esperanza de verla, le llamaba por celular incluso la fue a buscar a la escuela y allí se encontró con su amiga Haemi.

🔷 🔷 🔷 🔷 🔷

—Mientras me dirigía a clase ví a lo lejos a Kyuhyun, acercándome a él, lo veo detenidamente, luce algo decaído, aunque no lo diga sé que sus problemas son de amor, ese cambio es una muestra, la mirada perdida y murmurar, aunque le hable no escucho, toque su hombro y volteo, sus ojos expectantes esperaban que fuera ella, pero no, su esperanza se esfumó aún así me saludo más decaído.

Le pregunte que hacía allí en la escuela, casi en un susurro balbuceo —estoy preocupado por Hajoon, no sé donde se encuentra— tanta lástima daba que estaba a punto de decirle donde encontrarla, de no haber sido porque Shinwoo nos vio y se lo llevó a beber un café.

🔷 🔷 🔷 🔷 🔷

—¿Qué te pasa Kyu? Pareces muerto en vida, ¿dónde te has metido?

—La perdí, soy un idiota la he perdido para siempre.

—¿De verdad la amas? fue lo que pregunté.

—¿Cómo puedes dudarlo? todos estos días la he ido a esperar al parque, le he llamado y no contesta, es más Kimwoo, sé que se mudó, dime, acaso ellos dos están juntos, si me dices eso, perderé toda esperanza de estar con ella pero dímelo, es una agonía y una tortura saber que no la veré nuevamente, no a mi lado, sino junto a él.

La mesera llegó con sus cafés, diste un sorbo y antes de que hiciera alguna pregunta, y soltaste un suspiro empezando a relatar.

—Antes de que conocieras a Hajoon, solíamos charlar ocasionalmente, eran breves charlas y casi siempre eran de la estrategia del juego, ella es una linda chica, amorosa, tierna, algo tonta y distraída, tú lo sabes mejor que yo, no es así, tú, te convertiste en su incondicional, en su gran amigo, tú mi amigo me la robaste, conquistaste su corazón que deseaba tener, en mi caso, lo acepté, ustedes no parecían amigos, más bien eran una pareja, no te diste cuenta, eras el único que conocía su casa, sus pensamientos, incluso sus manías, dime de verdad, la veías como a tu confidente, ese día del partido cuando Kimwoo se presento tú estabas celoso pero no dijiste nada, aún la amo y por ello me hice aún lado, pero tú, estás aquí llorando y lamentando tu pérdida, crees que así la vas a recuperar, —incrédulo y sorprendido veo a Shinwoo, él también la amaba, pero dejo el camino libre, esa era una gran revelación.

—Retándolo con la mirada sin miedo a las burlas, grité es la chica que quiero que este a mi lado y me aferraré a ella, no importa cuanto tenga que buscarla, lo entiendes, es la única a la que puedo ver como mujer y a la que amaré hasta que muera.

Media hora tal vez paso cuando Kimwoo llegó, se veía nervioso, pero aún así se acerco a la mesa, miró a Shinwoo y luego a mi.

—Pidió un americano, sin dirigirse a nadie en particular, verán la ruptura era inevitable, ella no me ama, y por más que pasamos juntos tres meses, ella no podía olvidarte Kyu, lamento haberme interpuesto entre ustedes, pero yo la quiero a pesar de todo, y si ella es feliz contigo debes ser paciente, ella regresará a ti.

—Los miraba a ambos con más enojo que molestia, saben ¿dónde está ella ahora? tienen que decirme, debo verla, debo aclarar todo, debe saber que Yoona, ya no está conmigo, que desde el principio me gustaba, pero no tuve el valor suficiente para decirle lo que sentía.

—Durante un largo rato estuvieron hablando de lo que cada uno sentía por aquella chica tonta, como a cada uno de ellos, lo había ayudado a ser mejor persona, como solo dos de ellos, trataron de conquistar su corazón, uno se jugo el todo por el todo, en cambio Kyu había sido muy cobarde en confesarse y cuando estuvo listo para hacerlo, ya no estaba cerca.

Cuantos secretos fueron revelados, para sentirse mejor, pero cuantos desconocía ella, al terminar de hablar los chicos, le indicaron a Kyu que por el momento ella estaba bastante ocupada, él tenía que ser paciente y esperar a que regresará, si de verdad el amor era fuerte entre ellos, inevitablemente regresaría a su lado.

—No estaba para esperar a que supiera mis sentimientos, aún así acepté que tenían razón, antes de declararme, debía ser alguien de quien estuviera orgullosa, así después de esa charla, una nueva vida comenzó para ambos.

🔷 🔷 🔷 🔷 🔷

—Me sentía agotada después de una semana complicada, mucho trabajo, no tenía tiempo ni para pensar, debía agradecerle a mis profesores la oportunidad y luchaba cada noche contra el recuerdo de Kyu y no llamarle, esa primer semana fue una completa agonía, pero poco a poco los días fueron pasando hasta convertirse en semanas, las semanas en meses, y así hasta llegar hacer un año.

*Un año después*
—Por fin, la siguiente semana volvería a Seúl, gracias por venir ayudarme Hae Mi, no sé que hubiera hecho sin ti.

—Eres una tonta, debiste haberme dicho antes, ¿cómo piensas llevarte todas estas cosas?

—Miré todo lo que había comprado en mis dos meses de depresión, peluches de toda clase, mientras hacia un puchero a Hae Mi murmuraba cada que tenía ganas de hablarle a Kyu compraba uno, que iba a saber que al final me gustarían tanto que los conservarías todos.

—Sabes que Shinwoo está en sus últimos exámenes, solo unos meses para disfrutar y luego comenzará a trabajar, por fin ya es oficialmente doctor.

—Yoona, seguía luchando contra Kyu, sobre todo porque se encontraban frecuentemente cuando iban a la biblioteca, pero debía admitir que era cierto que amaba a Hajoon, durante todo ese año, no vio a ninguna chica y eso que se había vuelto muy popular por haber ganado el segundo lugar con su proyecto de arquitectura.

Kim Woo, comenzaría a trabajaba en una firma de abogados el próximo año, dos meses de completa soltería, y se encontraba contento, por que HaJoon se había mantenido en contacto con él, y le había pedido que no le dijera a nadie, incluso se había escapado dos veces para ir a verla, se sentía completamente enamorado y como no, si era correspondido por la más hermosa de las chicas, está vez su corazón no iba a ser roto.

Kyu Hyun, estaba bastante decaído en casi todo el año desde que HaJoon se marchó no había recibido noticia alguna de ella, Shin Woo continuamente le decía que debía ser paciente, pero sentía muy en el fondo de su corazón que ella lo había olvidado, ni siquiera jugaba ya con ellos, había puesto un anuncio en su perfil, diciendo que se iba a retirar por un tiempo, pero eso no lo ayudaba, como siempre el terminaba en el parque mirando los columpios y recordándola, cada noche que pasaba allí, sacaba de su bolsillo la bolsita de terciopelo rosa con el dije de corazones entrelazados, pensando que llegaría el día en que ella lo luciría.

Ese 7 de noviembre, todos recibirían una sorpresa, Hae Mi, estaba en la estación, HaJoon le había confirmado que llegaría a las 20:00 hrs., que llegaría junto con Kim Woo. Shin Woo también llego para recibirla, el único que desconocía el asunto por completo era Kyu.

Después de salir del trabajo, se sentía sumamente cansado, y pensó que era tiempo de que su gris estación llegará al fin, sólo faltaba un mes para terminar el año, un mes más sin ella, su corazón se encontraba congelado, pero tuvo un extraño presentimiento, miro al cielo y empezó a nevar, no llevaba ni suéter ni bufanda ni guantes, al parecer no le afectaba el clima, la luna llena se burlaba de él, sus pasos lo llevaron deambulando por la calle en esa oscura noche hasta el parque, había tomado la manía de escuchar música mientras estaba sentado en la banca, extrañándola más que nunca, añorandola, sintiendo la calidez de su cuerpo junto a él, recordando como pudo haber sido su primer beso, pero no, fue un completo tonto, pero aún así el seguía recordándola, amándola y siempre en sus ojos era la única a quien podría amar con esa intensidad.

Zutto kimi no koto wo omotteiru yo (Siempre pienso en ti), y el milagro se hizo, estaba soñando despierto de nuevo, ella parecía estar allí, vaya que su imaginación le estaba jugando sucio pensó mi adorada HaJoon, te extraño tanto que ahora incluso puedo verte, pero, no, no era mentira, escucho claramente cuando Kim Woo la llamó HaJoon, HaJoon donde te has metido, lo vio acercarse a ella, y esta vez su corazón se detuvo en el mismo instante que ella volteó, sus ojos se encontraron, perfecta sincronía, el olor a cereza combinado con zarzamora, era ella en verdad, su ángel, fueron segundos antes de llegar a ella, sus ojos suplicantes la miraban y sintió una punzada muy dentro de él, al comprender que su presencia sobraba allí, pero no fue así, Kim Woo tosió suavemente para que lo vieran y dijo, creo que el quinto mandamiento dice no estorbarás verdad chicos, y no puedo tampoco dejar que mi novia, este esperando mucho.

Kyu sonrió y sin detenerse a pensar en nada más la abrazó, te atrapé, pequeña fugitiva, perdóname dijeron los dos al unísono, te amo, nuevamente los dos a la vez, y comenzaron a reír, me volví loco por pensar que te había perdido, porque te fuiste sin dejarme explicarte, HaJoon lo miró y le sonrió solo como ella sabía para volver a darle calor a su corazón, porque tenía miedo de mis sentimientos, porque esos malos entendidos nos separaron y porque debía aceptar que fueras o no mío, debía aprender a estar sin ti, si lo lograba podría confesarme y aunque me rechazarás, no perdería la esperanza.

Quieres saber un secreto, durante todo este año, compre muchos peluches del come galletas pensando sólo en ti, Kyu comenzó a reír como no lo había hecho en meses, sacó de su bolsillo aquel dije que durante un año conservó y se lo coloco, ahora no podrás escapar, porque ya eres mía, y la besó...

{Capítulo X...} {Capítulo XII...}